lunes, 25 de mayo de 2009

LO QUE NUNCA TE DIJE

Las cosas que me reprochaste que nunca te dije
estaban en cada silencio,
pues hay cosas que de grandes
no salen por la boca
y hay miradas que arden como el infierno,
como hay manos abiertas que,
aunque vacías, dan el mundo,
como hay escalofríos que son volcán,
besos que, por lentos, quieren perdurar
y hay lágrimas que son la expresión máxima de la vida,
hay silencios que son la explosión del corazón
y hay miradas que son la entrega del alma.

Si no supiste sentirlo,
quizás hiciste bien en partir.

lunes, 18 de mayo de 2009

VERSOS PERROS

Me salen los besos lentos
porque nacen con vocación de quedarse.
Me gustan los versos perros
porque acosan con sus ladridos mis debilidades,
porque me son fieles sin pedirme nada a cambio
y acuden a mi auxilio sin llamarles.

Me gustan los versos perros
porque su nana de ladridos
me duerme cada noche,
porque lamen mis heridas
y me arropan en mi guarida.

Me gustan los versos perros
porque me aceptan como soy,
sin condiciones,
porque me miran a los ojos.
Me gustan los versos perros
porque me despiojan y me vigilan.
Y se quedan.

Me caldea la tenue llama
de los besos lentos
y los versos perros.

martes, 12 de mayo de 2009

GRACIAS

Donde nos llevó la imaginación
donde con los ojos cerrados
se divisan infinitos campos
donde se creó la primera luz
germinó la semilla del cielo azul
volveré a ese lugar donde nací

De sol, espiga y deseo
son sus manos en mi pelo
De nieve, huracán y abismos
el sitio de mi recreo

Viento que en su murmullo parece hablar
mueve el mundo y con gracia le ves bailar
y con él el escenario de mi hogar.
Mar bandeja de plata, mar infernal
es un temperamento natural
poco o nada cuesta ser uno más.

De sol, espiga y deseo
son sus manos en mi pelo
De nieve huracán y abismos
el sitio de mi recreo,
Silencio, brisa y cordura
dan aliento a mi locura
Hay nieve, hay fuego, hay deseos
allí donde me recreo.

Antonio Vega, quien hoy ha fallecido pero no ha muerto.

Gracias, Antonio, por enseñarme que la melancolía también hormigona la lucha.
Nos vemos.

lunes, 11 de mayo de 2009

SU ALMA ME HABITA

Su sonrisa es una huella que no difumina el viento del olvido,
mis lágrimas no desvanecen su silueta al borde del mar,
mi soledad repica su campana de lamento perpetuo,
su tacto es un calor que no me arrebata el invierno sobrevenido,
su amor cincelado en esta piedra que no erosiona el tiempo aniquilador.

Su alma me habita burlando a la guadaña.
Nos las entregamos.
Su alma me habita y ahora es mi vida
tras la furia de la corriente.
¿Acaso provocamos a algún dios?
¿Acaso la envidia reina sobre el destino?
¿Acaso Dios envidia?

Su alma me habita
y no me la puede quitar.

domingo, 3 de mayo de 2009

NO TENEMOS REMEDIO

El otro día pasé varias horas en el edificio de consultas de un centro hospitalario. Debía de ser una planta de las duras. No dejo de recordar cómo en aquel pasillo se me caía la cara de vergüenza. Nos pasamos la vida lamentándonos de nuestra supuesta mala suerte, de lo que nos falta, de lo que nos sobra, de lo que quisiéramos y no podemos. Lamentos que nos alejan de la felicidad porque nos bloquean la percepción de lo afortunados que somos. Tenemos tantas cosas, que sólo nos sirven para desear más y aspirar a más. Una vorágine suicida.

El otro día vi personas con problemas terribles, con el letrero del dolor en su frente, arrastrando pesadísimas cadenas. No vi a nadie rendido, una sola toalla en el suelo. Vi una dignidad que me provoca envidia en la misma medida que debería producirnos vergüenza a los que tenemos salud, y tener salud es tener los medios, y sólo reparamos, para compararnos, en quien puede más que nosotros, en quien tiene más que nosotros, en quien ríe más que nosotros. Somos indignos ante estas personas, no tenemos su capacidad de lucha, su capacidad de exprimir cada rayo de luz que se filtra entre su penar, su capacidad inmensa de valoración y agradecimiento, su ilusión, su ansia, su rabia, ¿por qué no?, porque para asirse así a la lucha hace falta rabia frente al destino, porque ilusión y rabia también son sinónimos. Y nos quejamos nosotros, que todo lo tenemos y nada apreciamos porque nada nos basta. Se nos pasa la vida porque nuestro empeño principal es esperar más, aún.


Nos faltan mil cosas, ¿y qué?, hemos tropezado mil veces, ¿no nos hemos podido levantar? Tenemos salud para intentar y fracasar y volver a intentar las veces que haga falta, dependemos de nuestro coraje, de nuestro ánimo, ¡dependemos de nosotros mismos!, somos unos privilegiados y perdemos el tiempo sumiéndonos en la insatisfacción mientras estas personas nos inundan a base de lecciones cada día. Pero no los vemos, están en la trastienda, no son héroes para la tele.


Siento vergüenza en la comparación y lo peor de todo es que no tenemos remedio. Dentro de un mes yo habré olvidado lo que vi y vosotros habréis olvidado lo que acabáis de leer. Hasta que nos ocurra (Dios no lo quiera) y entonces lamentaremos los años y las posibilidades que dejamos pasar, mientras pudimos, de haber saboreado las cosas sencillas, las de verdad, las que estremecen la piel y emocionan el alma. Las que nos hacen personas.
Estamos demasiado ocupados en perseguir para darnos cuenta.