viernes, 30 de mayo de 2008

EL LIBRO DE LOS SUEÑOS

Se me presenta de nuevo
un caminar solitario.
Me hiciste creer que
querías compartir mi caminar,
pero al tiempo resultó ser
que conmigo sólo querías jugar.

Soñaré lo que nunca tuve,
lloraré lo que ella me insinuó y no me dio,
le escribiré en el libro de mis fracasos.

Eliminado.

No se debe jugar así
con los sentimientos de la gente.
No se debe frivolizar con los besos del corazón.
Hay corazones que no soportan
que les hagan usar y tirar.

Es egoísta marcharse así,
cuando ya no tienes necesidad de recibir,
sin importarte lo que dejas tras de ti.
No se puede encender un fuego
e irte sin mirar atrás,
con indiferencia de si se quema
el hogar donde buscaste refugio.

No se puede usar a las personas
como a salvavidas
a los que abandonas en el agua
tras alcanzar la salvadora orilla.

No todos los corazones son iguales.
El tuyo puede ser frío como el acero
pero el mío bombea sueños,
y en ellos el amor no se representa
como en los tuyos,
en forma de pesadilla.

Pensándolo mejor
no te escribiré
en el libro de mis fracasos.
El fracaso es tuyo.
Yo sentí de verdad,
yo soñé y fui feliz.
Mis besos fueron sinceros
Y mis ojos no mintieron.
Hablaré de ti en el libro
de los sueños posibles,
porque se que soy capaz
de recibir y devolver.

¿Qué frío egoísmo puede llevar
a usar y tirar el corazón ajeno?
Sin mirar atrás,
sin remordimientos.
¡Qué frío!
¿No lo sientes?

miércoles, 28 de mayo de 2008

SE BUSCA VIVO O.......CASI

Se busca un corazón vivo o……casi.
Busco mi corazón, desconozco su paradero.
No se si me lo dejé atrás o huyó hacia delante
en busca de lo que le negaba.
Viaja solo y en su mirar se adivina un pesar,
por las raíces de la duda enquistada.
Pienso que se fugó por tenerlo preso
y no soportar más la condena al frío indefinido.
Es fácilmente reconocible,
presenta un viejo agujero de bala,
un rasguño reciente
y marcas de férreas ataduras.
Yo mismo se las anudé.
He decidido que ha llegado el momento
de liberarle de su condena
y no se lo puedo comunicar.
Ahora se cómo sanar sus heridas
y aliviar su tristeza.
Es fácil, mirando hacia delante.
Prometo no volver a recluirle
en aras de mi supuesta tranquilidad,
ya que ésta la he descubierto falsa.
Desconozco si se mantiene con vida,
pero no importa, se cómo resucitarlo:
dejándolo bombear, sugerir,
exigir, respirar, intuir….
sin las ataduras que le impuse
ni la escarcha del invierno asumido.
El frío cráter apagado
que dejó su marcha lo está esperando.
Ruego que si alguien lo ha visto,
en algún cruce de caminos, quizá, me llame.
Iré en su rescate.
Ahora se lo egoísta que con él he sido
y lo ciego que he estado.
No me sorprende que no soportase
su vida en el limbo.
Quiero decirle que le quiero alojar
de nuevo en mi pecho
con derecho a total libertad,
porque su libertad será la mía,
su reír, mi reír, su soñar, mi soñar.
Lo encontraré, es inevitable.
Y ahora nuestro caminar será a la par
y nuestro respirar acompasado.
El sabe lo que quiere
y yo lo que no le pienso negar.
Se busca un corazón.

domingo, 25 de mayo de 2008

NO TIENES PERMISO


No tienes permiso.
La gente como tú nunca se va.
Demasiada huella.
Representáis demasiado.
La capacidad de soñar,
de asumir los sueños,
de tener el coraje de perseguirlos
y de vivir por y para el corazón.
Demostrándonos al resto
que todo ello es posible.
Y sin tener un porqué.
Y es que los sueños no los tienen,
son eso, sueños.
Demandas y súplicas del corazón.
Sin porqués, sin razones.
Subir una montaña,
arriesgar la vida por hollar una cumbre,
no tiene respuesta a un porqué,
a una lógica o a una razón.
Es un sentimiento,
un aleteo, un soñar.
Un vivir.
Ya está.
Corazón.

La gente como tú
nos demuestra que vivir
con el corazón es posible.
Ese es vuestro mérito,
vuestro servicio, vuestro valor.
Por eso no os vais, no tenéis permiso,
no os lo permitimos.
Tu sueño fue blanco y tu ejemplo luz.
Siempre estarás aquí
porque nos asimos con todas
nuestras fuerzas a tu ejemplo.
Soñar y perseguir.
No te has ido, no te irás.
Perdurarás.
No tienes permiso.

jueves, 22 de mayo de 2008

EL CUENTO AL REVÉS

Lo mío es el mundo del cuento al revés.
Fui el sapo que besó a la princesa
para librarla de su encantamiento,
el que le produjo una manzana envenenada.
El cuento al revés.

He regalado unas alas a Icaro
y le he enseñado a volar seguro
aplicando la experiencia y la prudencia.
Me ha respondido que teme a las alturas.
El cuento al revés.

He advertido a Caperucita
qué camino tomar en el bosque
para no encontrarse con el lobo.
Me he ofrecido a cargar con su cesta
y la dulce niña, de rojo vestida,
me ha mordido la mano.
El cuento al revés.

Con estos precedentes
me ofrecí a ayudar al escorpión
al río cruzar.
¿Qué me podía ocurrir?
Seguro estaba de no correr peligro.
Tenía claro que en este, mi cuento,
el veneno no envenenaba,
el aguijón no me pinchaba.
Sin llegar a la orilla fui picado.
¡Este no fue al revés!

No es mi mundo el que está al revés.
Es mi suerte la que me ha abandonado.
Me sentaré en el camino
esperando que alguien me aporte
el antídoto a mi mala suerte.
No se si aguantaré quieto
o si me llegaré a fiar.

A ver si cuando me ofrezcan la manzana
me vuelve el cuento a salir al revés
y no es la bruja malvada
sino la princesa esta vez.

martes, 20 de mayo de 2008

NO ME FALTES

Acallas el grito del dolor,
alzas el párpado abatido,
licuas la escarcha del corazón,
serenas el temblor de las manos,
iluminas el túnel del miedo,
sanas la herida de ayer,
disuelves la nube oscura,
calmas la angustia de la duda,
mitigas la fatiga del caminar,
liberas el beso cautivo,
extirpas el fracaso enquistado,
alientas la ilusión incipiente,
repones la moral maltrecha,
reavivas la llama agonizante,
asistes en el final inevitable.

En este mar de bravo oleaje,
no me faltes nunca,
esperanza.

ARCO IRIS


Conduciendo de vuelta a casa
surgió ante mí un arco iris.
Nunca estuve tan cerca
de un torrente de color.
Avancé intrigado hacia él,
mas hasta el punto de tocarle
no me dejó acercar.

Escapaba ante mi
a idéntica velocidad.
Inalcanzable como una ilusión
que no te corresponde.

Era una foto en mi parabrisas,
tal vez un señuelo al que seguir,
un mensaje sutil,
enviado por un rayo de luz
que surge en los días oscuros
que me ha venido a decir
que el futuro es a color
y que cada ilusión he de perseguir.

jueves, 15 de mayo de 2008

UN TANGO, ADOLFO

Mátame Adolfo.
Márcate un tango ya
y ponme la piel de gallina
hasta que me salgan plumas.

Busca en el fondo de tu vaso,
cerca del final
o donde acaban tus pies
y hazte un tango

con lo que nadie nos contó,
lo que se quedó en la piel.

Tú que dices no ser un poeta
y nos adivinas el sentir a todos,
nos haces mirarnos dentro,
reír, llorar, soñar.
Sueños locos.
No te equivoques otra vez,
hazlo mil veces,
porque nos pones los pelos de punta
al robarnos jirones de sentimientos
y hacerlos canción.
Porque nos curas las heridas
de pasar descalzos los trozos de cristal,
y es que esto es como el mar.
Es lo que te queda, Adolfo, un tango.

Di que sí y que les den a los delatores
de presuntas ventas de almas,
justo lo que ellos no tienen.
Róbanos más sentimientos
y hazte un tango,
hasta perder el control.
Pelos de punta
y emoción vidriosa en los ojos,
que nos sintamos vivos,
que nos sobre la luz.
Un tango Adolfo.
Mátanos de sentir.

lunes, 12 de mayo de 2008

ARENA EN LOS OJOS

He abierto los poros de mi piel,
no me conformo con cinco sentidos,
ahora mi corazón a toda vela.
Ahora en mis sueños la hierba es verde
y las noches muestrario de estrellas.
Cuando llega la tormenta se que escampará.
Me siento, digiero y espero.
Espero y recupero el coraje para soñar
y sueño que 1+1 es mucho más que 2,
sueño porque me prefiero feliz,
sueño porque prefiero perseguir
a ser arrastrado.

Las lágrimas que derramo
me limpian la arena de los ojos
que durante tanto tiempo me impidió ver
lo que yo me empeñé en negar.
Que puedo volver a ser,
sentir, recibir, dar.
Que hay una historia que escribir
si no dejas tu corazón morir,
si le curas las heridas y le permites exigir
y le atiendes cuando reclama su botín de calor.

Todo esto lo se gracias a una flor de invierno,
quien con su milagro me rescató del miedo.
Y ahora que ella me sacó del túnel,
mostrándome la ruta a seguir,
necesito escribir estas líneas
por si a alguien le pueden servir.

No permitáis a vuestros corazones rendirse.
Abrid los poros de la piel,
desplegad todos los sentidos,
navegad a toda vela,
no os creáis la tabla de sumar,
no os impongáis la de restar.
Soñad con lo que os falta,
tened coraje y perseguir.
Y no temáis si la emoción os hace llorar.
Las lágrimas limpian la arena de los ojos.

viernes, 9 de mayo de 2008

NO ME SALVEIS

Todo el personal arropado por el rebaño
dejándose llevar, guiar, manejar.
No te muevas o no saldrás en la foto,
no te salgas de las normas o serás desplazado.
Los mismos programas en las teles,
las mismas canciones en las radios,
las mismas consignas en todos los medios.
Has de seguir el patrón para mantener la función.
Piensa políticamente correcto y no te machacarán los gurús
infiltrados en lo que lees, ves, vistes y comes.

Tengo personalidad y criterio,
me equivoco por mi mismo
y no persigo la zanahoria
ni la liebre mecánica.
Nado contra corriente si me lo indica mi conciencia.
No quiero vuestro cobijo lanar,
rechazo vuestra aceptación insustancial.
No me liberéis, dejadme estar.
Sentís igual, pensáis igual, soñáis lo mismo.
No sonáis.

¡Y creéis que decidís por vosotros!
Dejadme pensar, acertar, errar.
Rechazar vuestro uniforme a la moda,
despreciar vuestros menús de vanguardia,
repudiar vuestro arte moderno, ¡vaya timo!
Me guían mi instinto, mi moral y mis principios.
Creo en cosas que a vosotros no os permiten,
lloro por emociones que nunca sentiréis
y he aprendido de errores que nunca cometeréis.

Creo en la libertad del individuo,
en su criterio y personalidad
y en la diferencia con respeto.

Somos especie en extinción.
El rebaño y sus guías no nos aceptan.
Nos llaman raros, incómodos y complicados,
meditabundos, silenciosos y solitarios.

Seguiremos sintiendo el frío,
pero es de piel para afuera.
Dentro de nosotros nuestro corazón arde
porque no nos queda otra alternativa
que pensar cada paso que dar
porque no seguimos el guión.
Un continuo luchar que no quiero abandonar.

Así que dejadme estar,
no me salvéis.
No me abráis vuestro redil,
mar plano sin oleaje.
Estoy bien así.
Descubriendo qué me ofrece cada día
y cómo lo voy a afrontar.
La vida como aventura,
como aventura del SER y del SENTIR.
Llamadme raro y rechazad mi incomodidad.
No quiero vuestro rescate.
No me salvéis.

martes, 6 de mayo de 2008

AMARILLO


Hoy una mujer me ha dicho
que empezó a quererme
y que no llegó.
Una vez más
el amor me es esquivo
¿Será mi sino?

He amado poquísimas veces
y cuando me amaron
no correspondí.
El destino me paga
con mi propia moneda.
¿Será mi sino?

Dos veces decidí apostar.
Una perdí
y la otra la ruleta
no llegó ni a girar.
Soy mal jugador
y buen perdedor.

De ambas ilusiones aprendí.
Con ambas mejoré.
La primera
saltó mi corazón en añicos,
la segunda
me lo pintó de amarillo.
Amarillo esperanza,
amarillo limpio.

Nadie me miró así,
nadie me abrazó así.
Mi cielo escampó
y no era azul,
era amarillo.
Amarilla fue la flor que nació
en terreno quemado.
Amarillo fue, pues, el milagro.

Amarillo será el recuerdo,
como la llama incipiente
que se extinguió.
Porque mi última ilusión
de amarillo pintó mi corazón.

sábado, 3 de mayo de 2008

MUÑECOS DE PELUCHE

¿Cuántos muñecos de peluche
tenemos en nuestro cubo de la basura?

Nuestra calidad humana es
inversamente proporcional
a los amigos que hemos dejado atrás, olvidados,
después de que nos hayan ayudado en nuestro caminar,
en un atolladero, en un charco,
en un callejón que creíamos sin salida.

Todos hemos dejado atrás,
olvidados, a más de los que deberíamos,
resultando desagradecidos, egoístas.
Muñecos desechados
cuando ya no los necesitamos a nuestro lado
para conciliar el sueño.

Volvemos la vista atrás y los vemos.
¡Dios, no los recordábamos!
¡Estuvieron ahí, fueron tan importantes
en aquel momento!
No nos pidieron nada a cambio
ni se dedicaron a recordarnos
cuan importante fue
lo que por nosotros hicieron,
haciéndonos rehenes, deudores, del pasado,
y por ello mismo los hemos olvidado.

Clavos ardiendo convertidos en muñecos de peluche.

Somos desagradecidos por naturaleza, egoístas.
Todos tenemos muñecos de peluche
en nuestro cubo de la basura.

Todos nos sentimos, al mismo tiempo,
muñecos de peluche en el cubo de la basura de alguien.
Alguien a quien nos ofrecimos sin reservas,
a quien le dimos lo que somos, todo.
Y todo lo despachó al olvido.
Llamadas que se espacian en el tiempo,
recuerdos que se difuminan.


Cuando pasamos por momentos
en los que necesitamos un cable,
un salvavidas al que asirnos,
un ánimo, una sonrisa,
un “¿cómo estás?”, un abrazo,
nos acordamos de lo que dimos
y sentimos el olvido como pago.

Muñecos de peluche indispensables en un momento,
inservibles y molestos con el paso del tiempo.
Muñecos de peluche en el cubo de la basura.

¿Cuántos tienes en el tuyo?