martes, 29 de abril de 2008

¿QUE TE QUEDA?

Si te resignas a que mañana sea como ayer,
si al cielo impoluto le pintas nubes,
si llorar por lo que pudo haber sido te impide ser,
si al agua alegre le pones diques,
qué te queda?

Si por miedo te niegas los sentires,
si el dolor de la memoria te discapacita el mañana,
si por un traidor crees que Judas vive en todos,
si te asusta tener esperanza porque una vez la perdiste,
qué te queda?

Si te niegas a caminar porque alguna vez tropezaste,
si dudas de alguien especial porque no es como los demás,
si le perdonas menos porque no es como los demás,
si alguien te da miedo porque te dice lo que siempre quisiste oír,
qué te queda?

Si te asustas por hacer algo que te hace reír porque no estaba en el guión,
si te niegas la aventura del bien ser por la seguridad del bien estar,
si te asustas al sonreír por algo porque creías no ser así,
si te niegas a las emociones porque conllevan llorar,
qué te queda?

Si te frenas cuando el viento sopla a favor,
si te niegas a avanzar porque una vez elegiste camino equivocado,
si te tapas los oídos cuando el corazón te grita: “¡nunca es tarde!”,
si permites que un fracaso se convierta en un estigma,
qué te queda?

Si no aceptas que del desamor se huye hacia delante,
si piensas que cada vez que montes en una nube ésta va a descargar,
si permites que el hábito sea tu único horizonte,
si te niegas a aprender del pasado y a admitir que el futuro es allá a donde vamos,
qué te queda?

Si sólo valoras lo que tienes para ignorar lo que te falta,
si te empeñas en sangrar tus cicatrices de otra vida,
si decides desactivar la intuición,
si optas por asistir a tu propia vida en lugar de vivirla,
si mueres de nostalgia por algo que rechazaste vivir,
si haces de tu corazón el enemigo a combatir,
qué te queda?

Te queda…

Dejarte SER.

lunes, 28 de abril de 2008

JUEZ Y PARTE


Tengo mala suerte
y es que soy juez y parte.
Creo que sólo tengo una virtud,
espero ser el único que así piensa,
y es el propósito sincero
de ir más derecho que una vela.

Bajo la ley de mis principios y valores,
que no será la mejor ley
pero al menos tengo una,
que hoy en día, en esta vida,
no se si es lo corriente,
me examino cada día
y me condeno bastantes.

Analizo severamente mis pasos
y no me perdono ni una.
No pretendo caer bien,
lo primero es no traicionarme
porque cada noche
conmigo me tengo que acostar
y si algo me reconcome,
el sueño me impide conciliar.

Así que no me queda otra
que vigilar celosamente
que no incumpla mi ley,
la de mis principios y valores.
Lo cual es un incordio
pero cada uno es como es
y algunos somos tontos.

Así que cuando cometo un error,
más de los que quisiera,
yo mismo me detengo
y me siento en el banquillo.
Yo mismo soy mi juez y mi reo
y si me declaro culpable
me impongo penitencia.
Aunque por suerte he de decir
que no me cuesta nada pedir perdón.

Tener principios hoy en día,
cuando prima el relativismo
el egoísmo y la frivolidad,
resulta una desventaja
en esta lamentable sociedad.
Pero algunos hemos nacido así
como otros han nacido zurdos
y no nos queda otra a ambos
que apañárnosla como sea.

Ejercer de fiscal y acusado
no es para nada masoquista,
es una lucha diaria
por ser mejor y más honrado,
por vivir con honor.
Esa cosa pasada de moda
que nadie te puede dar
y nadie te puede quitar.
Es algo que te regalas a ti mismo.

domingo, 27 de abril de 2008

LO QUE ME DABAS

No eran tus ojos,
era tu mirar.
No eran tus labios,
era tu besar.
No eran tus manos,
era tu abrazar.
No era lo que tenías,
era lo que me dabas.

Era lo que me dabas
lo que me hizo soñar
que al fin el camino
podríamos hallar.

sábado, 26 de abril de 2008

EL VIENTO

Desde mi cama oigo soplar el viento.
¿Alegre, furioso o fugitivo?
Nunca he sabido si viene o va
o descansa en algún momento.

En otoño desnuda a los árboles
y en verano nos alivia.
Creo que nos trae mensajes
y no le escuchamos.
Se lleva algo de nosotros
y no lo notamos.

No le escuchamos….
cuántas cosas se nos escapan
por no prestar atención,
pendientes como vivimos,
de ajustarnos al guión.

Vivimos presos del hábito
y no nos damos cuenta.
Lo más triste de todo
es que, en realidad,
la puerta de la jaula
tenemos abierta.

¡Cuántas cosas se nos escapan!
Miradas, palabras, silencios,
regalos, sueños, demandas,
ajenos y propios.

Ciegos, mudos y sordos,
todo por no darnos cuenta
de que tenemos un corazón
que no sólo bombea,
también alienta.

viernes, 25 de abril de 2008

EL BALCON DEL OLVIDO

Hoy me he asomado al balcón del olvido.
Trae el viento fragancias de tiempos pasados,
las risas de una infancia feliz.
Enemigos a los que decidí olvidar,
pues no los necesito vencer,
los prefiero ignorar.
Errores de inmadurez
que ya no puedo enmendar,
aciertos de intuición
que no puedo razonar,
lágrimas, jugo del amor no correspondido,
canciones que no supe cantar
y nunca olvidaré.

El balcón del olvido…

Veo caminos que nunca emprendí
y no se adonde me habrían llevado.
Ante algunos dudé,
pero de otros huí.
Osadía, nunca me sobraste.
Cosas que me parecían imprescindibles,
ahora su sombra apenas perceptible.
La vida corría deprisa
y los años pasaban despacio.
¡El futuro quedaba tan lejos!

El balcón del olvido….

Puertas que por suerte traspasé
y otras que me pillaron los dedos.
Charcos en los que me metí
y de los que, mejor o peor, salí.
Rosas que de todo me brindaron,
unas sus espinas y otras su perfume,
escombros de sueños incautos,
cielos que nunca alcancé,
ni siquiera los rocé.
Silencios que no rompí
y luego me arrepentí.
Y la luna, algo que nunca prometí.

El paisaje de lo que soy,
del camino que me ha traído.
Siento que de casi todo lo bueno
han pasado más de veinte años.
Supongo que es un bache, la fatiga.
Necesito aire fresco,
llenar los pulmones,
un ánimo.


El último me lo robó
una promesa incumplida
de no poner diques
y dejar correr el agua.
Promesa incumplida,
hasta la vista.
Cuando vuelva a asomarme
a este balcón.

El del olvido.

jueves, 24 de abril de 2008

EL MIEDO

El miedo es un túnel sin iluminar,
una cadena en la voluntad,
un necesitar pero negar,
arrodillar en lugar de luchar,
conformar en lugar de aspirar,
lamentar en lugar de buscar,
esperar en lugar de acudir,
callar en lugar de expresar,
reprimir en lugar de sentir,
estar en lugar de ser,
asistir en lugar de vivir,
decidir por encima del sentir.

Decidir por encima del sentir…
Llegados aquí,
a esta capitulación,
nos convertimos, ya sí,
en nuestro único enemigo.

Único, porque no necesitamos más.

miércoles, 23 de abril de 2008

LA CUMBRE


Desde mi ventana veo una montaña.
La más alta, la más bella, la más sola.
en otoño le cubre la bruma,
en invierno se viste de blanco,
en primavera derrama vida por sus laderas,
y en verano me llama.

Me siento en su cima y ella me habla.
Desde allí todo se ve pequeño, lejano.
Pero abajo son más, no hay soledad.

¿Estos torrentes son tu llorar?
Quisiste ser la más alta
para el cielo alcanzar
y ahora te ves sola.
Preferirías bajar.

martes, 22 de abril de 2008

EL NO POR RESPUESTA

Hemos hecho una sociedad
que nos impulsa a ganar.
Por encima de todo
la consigna es triunfar.

Lo único que cuenta es
desear, conseguir y poseer,
sin principios, valores ni honor.
Nada en que creer.

Estamos inculcando
que lo que cuenta
es el éxito
y el placer personal
por encima de todo.
La semilla del mal

¿Quién tiene una cesta,
con estas mimbres,
para el no por respuesta?

Semilla que encuentra
terreno abonado
en el género masculino.
Monstruos que no aceptan
el no por respuesta,
monstruos que humillan
a mesa puesta,

bestias que descargan
todas sus frustraciones,
bestias que desangran
ajenas ilusiones.

Horrores que ocurren
de puerta adentro
y a los demás sólo importa
que no sea suyo el tormento.

Nos echamos las manos a la cabeza
pero sin querer reconocer
que toda esa bajeza
la hemos hecho crecer
entre todos.
Mientras, ellas padecen
la moral que nos hemos dado,
el honor que nos hemos negado.
Creemos que nos pertenecen,
que las hemos ganado.


Por encima de todo
la consigna es triunfar.
Lo único importante es
desear, conseguir y poseer,
sin principios, valores ni honor.


¿Quién tiene una cesta,
con estas mimbres,
para el no por respuesta?

SENTIR

Suelo escribir a golpe de lágrima.
Digo que las mejores canciones son las más tristes.
La muerte, la pena, el desamor...
son las mejores musas.

La tristeza nos recoge y nos hace reflexionar.
En la alegría nos limitamos a disfrutar.
El dolor extrae lo mejor de nosotros:
Reflexión, lucha, superación…

No aspiro a olvidar mis penas,
sino a aprovecharme de lo que me enseñaron.
Sólo así seré más fuerte.

Más fuerte quiero ser,
pero no dejar de sentir

y de emocionarme.
Aunque sentir sea llorar.

lunes, 21 de abril de 2008

CRISIS

Voy a entrevistarme
a ver si termino de conocerme
y, con un poco de suerte,
incluso comprenderme.

Espero acertar con las preguntas
y facilitarme las respuestas.
Tengo muchos cabos sueltos
y varias dudas no resueltas.

No se si quiero estar solo
o quiero compañía,
no se si volar o anclarme al suelo,
no se si nadar o guardar la ropa,
no se si bailar o quedarme quieto.

Siempre lo he tenido claro
pero al cumplir los cuarenta
me he venido abajo.
Estoy hecho un lío y no me aclaro.

No se si salir o cerrar la puerta,
no se si la de cuadros o la de rayas,
no se si vino o si cerveza,
no se si carne o si pescado.

No se qué hacer conmigo.
¡Joder, con los cuarenta!

domingo, 20 de abril de 2008

HAY QUE ESCUCHAR

Hay que escuchar.

Las decisiones tomadas en caliente,
después queman.
Hay que reposar las reacciones.
Sólo nos pueden decepcionar
las personas a las que estimamos,
aquellas de las que podemos esperar algo.
Nunca nos decepcionan las malas personas
pues estas son de fiar,
no cambian nunca.

Las personas que queremos,
las que necesitamos,
nos pueden causar inquietud.
De ellas esperamos siempre el máximo
por lo que son y por lo que nos trasmiten
y esa exigencia acaba siendo,
a veces, injusta.

Exigencia que nos hace impacientes,
Precisamente, con quienes más nos dan.
No lo somos con aquellos
de los que nada esperamos.
De quienes queremos y nos quieren
lo esperamos todo,
a ello nos han acostumbrado.
Por ello están más cerca de la decepción.

Hay que dejar enfriar.

Decepciones que,
la mayoría de las veces,
tienen una explicación
que nuestra ansiedad
nos había impedido valorar.
Nuestra exigencia tiende a ser implacable
con quienes más nos dan.
Con quienes más necesitamos.

Hay que escuchar,
hay que reposar,
hay que enfriar.

sábado, 19 de abril de 2008

MAÑANA TE OLVIDO

Cada mañana al despertarme
me propongo lo mismo.
Llevo tiempo decidido a olvidarte.

Tristeza me inyecta tu silencio,
tu incomprensible marcha.
Pero no puedo.
Cada noche me digo, mañana te olvido.

No se reaccionar al desamor
con odio, desprecio u orgullo
y querer olvidar me lleva a recordar.

Cuando me propongo conseguirlo
me digo que has jugado conmigo.
Luego recuerdo cómo me miraste
y creo que eso no se puede ensayar
y entonces me digo, mañana te olvido.

Otra mañana lo vuelvo a intentar.
Me empeño en decir que no fuiste sincera
y entonces recuerdo aquel abrazar.
Todavía tus manos queman mi espalda
y entonces me digo, mañana te olvido.

Cada mañana al despertarme
me propongo lo mismo.
Cada noche me digo
mañana te olvido.

LA VIDA

La vida es un continuo
cruzar el Mar Rojo
en busca de lo prometido.
Esperando que,
tras nuestro paso,
el agua arrolle
a los enemigos que nos persiguen.
Nuestros miedos y angustias,
dudas y fracasos,
traumas y pesares.

En busca de lo prometido.

Nuestras ilusiones,
esperanzas, anhelos.
Que nunca han de ser El Paraíso,
la luna, Eldorado.
Exprimir las pequeñas cosas,
sigilosos detalles,
naturales miradas,
imprevistos roces,
un simple “gracias”.

No despreciar el grano de azúcar,
él también endulza.
La ilusión es vida,
cuando no levita
y pierde la perspectiva.

Que la existencia del todo
no nos impida valorar
las pequeñas cosas,
pues se nos presentan más a menudo
de lo que creemos
y, por ambición,
las despreciamos.

Eso es la vida,
caminar en nuestra propia búsqueda,
pues somos lo que anhelamos,
somos lo que perseguimos.
Caminar, tropezar, levantar.
Imprescindible levantar.
Levantar y respirar,
a pleno pulmón.

Y si a lo largo del caminar
encontramos en quien apoyarnos,
con quien compartir viaje,
entonces…..

Entonces ya está.
Nada mejor por lo que luchar,
por que nos ocurra
como a los raíles del tren.
Cuanto más se alejan
del punto de partida
más se acercan,
hasta unirse
y así se pierden en el horizonte.

Esta es la vida en la que creo.
Que el camino me sea propicio.
Que sepa peregrinar.

SIEMPRE TE DEBERÉ

Si alguna vez el viento favorable
me empuja a volar
procuro que sea a ras de suelo.
Si alguna vez la suerte
me invita a soñar
procuro que sea despierto.
Si alguna vez creo ganar
tu memoria me recuerda
cómo huele el suelo

Ya me he hecho a la idea
de que concibo el amor
como nunca lo tendré.
Quizás mi corazón sólo
tenga pie izquierdo.
Nunca reproché al pasado
lo que contigo me negó,
sin embargo, le agradecí
cada sonrisa tuya que me legó.

No permito que no alcanzar
lo que tanto anhelé
me impida disfrutar
de los momentos en que lo acaricié.

A pesar del dolor que padecí
jamás te maldije
por no quererme acompañar.
Ni me puedo arrepentir
de haberte llegado a encontrar.
Al contrario, siempre te deberé
haber provocado en mi
lo que se puede llegar a sentir.
Demasiado para administrar
en mi inconsciencia juvenil.

Te debo el mayor golpe que sufrí.
Pero nunca, nunca olvidaré
que lo que por ti yo sentí
es lo más limpio y honesto
que jamás emprendí.

Tanto tiempo después,
superado ya el dolor,
no puedo más que agradecer
a Dios, al destino, ¡yo que se!
que en aquel Octubre lejano,
no se bien por qué,
mi corazón te fuese entregado.

EL INVIERNO

Veinte años pasé en el calabozo del invierno
donde el corazón malvive aletargado.
Veinte años de reclusión resignada,
incluso buscada y aceptada.

Por un fracaso me dicté sentencia
y de una celda hice mi fortaleza
pues el miedo me hizo cobarde
y en la negación busqué refugio.

Nada mejor que negar los sentidos
nada mejor que negar las ausencias
negar que existen caminos
negar que tienes carencias

Tantos años de negarme
tantos años de impedirme
para al final darme cuenta
que necesitaba encontrarte.

Vivir en la seguridad del encierro
con el corazón libre de abordajes
¿qué libertad es esa?
¿qué es vivir sin emociones?

Jamás volveré a recluirme
en un mundo plano y aséptico.
El corazón no entiende de razón,
ni se resigna a la rendición

Soñaré, apostaré, me liberaré!
afrontaré lo que el destino me ofrezca
y el riesgo del amor aceptaré
y si encuentro alguien que la merezca
toda mi ilusión le entregaré.

DOS MOCHILAS

Todo lo que soy
lo llevo en dos mochilas.
En la primera llevo
mis fracasos y penas,
en la segunda todo
lo que quiero compartir.

Ninguna pienso abandonar.
La segunda muero por entregar,
Lo que porto en la primera
no lo quiero olvidar.

El peso de la primera
de ningún modo me impedirá
que recorra el camino
que me lleve a encontrar
otro corazón errante
que la segunda quiera aceptar.

De lo que cargo en la primera
no reniego, ni lo desprecio.
Forma parte de mi,
de lo que soy y de dónde vengo
y no me infunde tristeza.

Aprovecho la experiencia
de la pena y el dolor pasados
para sentirme más seguro,
avanzar con más firmeza,
sin permitir de ningún modo
que el miedo a la recaída
Me haga perderme sentires
que me ofrece la vida.

Por eso guardo esa mochila.
Porque los errores no son lastres.
Lastre es la cobardía.